1 de diciembre 2020
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La Coalición Nacional suspendió indefinidamente de sus filas al Partido Liberal Constitucionalista, señalado de estar bajo “el control e influencia del orteguismo”, al dejar “la solución del conflicto interno del PLC”, entre las facciones que lideran María Haydée Osuna y Miguel Rosales, “en manos de la dictadura”.
Después de tres horas y media de deliberaciones, la Coalición emitió un comunicado titulado “Corrupción y pactos con el dictador no tienen cabida en la Coalición Nacional”, oficializando la separación del PLC.
Una fuente de la Unidad Nacional Azul y Blanco reveló que esta organización presentó una moción de expulsión del PLC, pidiendo que "se separe y se deje sin efecto la participación e integración de esa partido, en la Coalición Nacional". La moción de la Unidad fue aprobada en lo general por todos los miembros de la Coalición, con la excepción del PLC,
Posteriormente, el movimiento Fuerza Democrática Nicaragüense (FDN) propuso una nueva moción, estableciendo criterios más específicos sobre los cuales el PLC podría, eventualmente, reincorporarse. Bajo el planteamiento de FDN, el "PLC se podría reincorporar una vez que resuelva su litis interna, y sus nuevas autoridades den pruebas irrefutables de ruptura con la dictadura", indicó la fuente de la UNAB.
Luis Fley, presidente de FDN dijo a CONFIDENCIAL que la propuesta de que los miembros del PLC puedan reincorporarse a la Coalición Nacional quedó establecida en la resolución únicamente para las bases del partido y no así para la dirigencia del mismo y agregó que "se decidió separar y dejar sin efecto la participación del PLC dentro de la Coalición Nacional a partir del día de hoy".
En la resolución, el párrafo que recibió una votación unánime, sin el PLC, concluye: “Separar y dejar sin efecto a partir de hoy la participación e integración del Partido Liberal Constitucionalista de la Coalición Nacional, hasta que goce con autoridades de legitimidad democrática y las mismas den pruebas evidentes de la ruptura de sus lazos con el dictador y de su disposición para contribuir a la democratización de Nicaragua.”
Además, en la misma resolución la Coalición Nacional advierte que los Ortega Murillo están "asegurando su control del Partido Liberal Constitucionalista para apropiarse de las actuales estructuras electorales, que, por la actual Ley les corresponde".
"En mi condición de liberal y de miembro de la Unidad Nacional, reitero que las bases liberales no tienen culpa de los errores y pactos de sus cúpulas. Las puertas de la Coalición estarán siempre abiertas para todos los liberales de manos limpias, que rompan con el arnoldismo y deseen seguir apoyando la unidad de la oposición", dijo Félix Maradiaga, de la Unidad Nacional Azul y Blanco.
Separación "era inevitable"
Violeta Granera, que ocupa la presidencia rotativa de la Coalición en representación de la UNAB, expresó que la expulsión del PLC no debilita a la organización opositora ya que, según ella, está más que demostrado el vínculo del PLC con el FSLN y tener ese tipo de relación está prohibido en el código de ética de la Coalición Nacional.
"Yo creo que separar a un partido que de manera evidente ha dado pruebas de estar coludido con el Frente Sandinista lejos de debilitarnos nos fortalece. Para nosotros eso es lo más importante y vamos a continuar en la lucha, sentimos que era inevitable esta separación y nosotros tenemos un código de ética que muy claramente establece que no pueden haber organizaciones que estén coludidas con Ortega dentro de la Coalición Nacional", explicó Granera.
Una de esas pruebas claras de los vínculos del PLC con el FSLN, quedó demostrada, según varios opositores, luego que la presidenta del partido María Haydeé Osuna, lograra la desaforación de la diputada María Fernanda Flores de Alemán con los 70 votos de los sandinistas fieles a Ortega en el parlamento.
Osuna negó tener algún vínculo con el partido de gobierno, y alegó que, a diferencia del expresidente Arnoldo Alemán, “yo no he hecho pacto, no he negociado con el Frente Sandinista porque sabemos que el Frente Sandinista es nuestro adversario político”.
Sin embargo, la Coalición alegó que el PLC no logró convocar a su Gran Convención Liberal para elegir a nuevas autoridades del partido y con ello dieran "muestras claras", de que no existía ningún vínculo con el FSLN "lo que hasta la fecha no se ha realizado, ni se vislumbra posibilidad de que pueda efectuarse en un futuro cercano", dice la resolución, al exponer los motivos por los cuales fue expulsado el PLC.
"La vocación antidemocrática de un liderazgo desgastado que pretendió continuar imponiendo su voluntad al partido PLC, provocó la actual crisis interna, al frustrar las aspiraciones democráticas de sus bases que demandaban convocar a un proceso de elecciones internas de sus estructuras municipales, departamentales, regionales y nacionales. Las cúpulas que hoy aparecen confrontadas están haciéndole daño al liberalismo aislándose del sentir de la población y contraviniendo los estatutos y el código de ética de la Coalición", argumenta la Coalición en la resolución.
CONFIDENCIAL intentó comunicarse con Miguel Rosales para conocer sus reacciones tras la decisión, pero no respondió nuestras llamadas telefónicas.
Los conflictos del PLC
La litis interna del PLC por el control del partido, entre María Haydée Osuna y Miguel Rosales, con Arnoldo Alemán y María Fernanda Flores de Alemán tras bambalinas, empezó a inicios de año y fue sometida al Consejo Supremo Electoral controlado por el FSLN.
El pasado 26 de noviembre, la diputada y presidenta del Comité Ejecutivo Nacional del PLC, María Haydeé Osuna pidió la desaforación, pérdida de inmunidad y condición de diputada de María Fernanda Flores de Alemán en la Asamblea Nacional.
La desaforación se logró con los 70 votos sandinistas y 10 liberales, entre esos últimos se cuentan los del mismo Miguel Rosales que otrora actuó en representación de Alemán por mantener el statu quo dentro del PLC a favor del caudillo y luego pidió la renuncia de Alemán como presidente honorario.
El apoyo abierto del FSLN a una de las facciones en pugna del PLC evidenció, según la Coalición, el sometimiento del partido al orteguismo, que desembocó en la votación para suspender al PLC este 30 de noviembre, que fue convocada de emergencia el 29 del mismo mes.
